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 La falta de dirección, enfoque y propósito bien definido ha sido uno de los principales responsables del éxito de los días de innovación de las grandes empresas. En estos casos, falta una estrategia que dé dirección e integre las diferentes iniciativas de innovación de la organización. Comprenda en este artículo los principales síntomas de esta falta de estrategia de innovación a la que se enfrentan las empresas y cómo superarlos.

 

Se sabe que el mundo es cada vez más impredecible y los cambios se producen a una velocidad cada vez mayor, lo que obliga a las empresas a tomar decisiones más ágiles y asertivas si quieren seguir siendo agentes activos de este constante proceso de cambio. La pandemia de COVID-19 está ahí para ilustrar bien este contexto: las organizaciones que no son lo suficientemente rápidas y estratégicas para adaptarse a la nueva realidad que impone pueden quedarse atrás y perder relevancia en su sector.

La innovación es, sin duda, una forma muy poderosa, viable y eficaz de no solo garantizar la supervivencia empresarial en este nuevo modus operandi social y económico, sino también generar valor y hacer que la empresa cabalgue esta ola hacia la relevancia y el crecimiento sostenido.

Por eso vemos hoy que los esfuerzos de innovación se multiplican significativamente dentro de las empresas, asumiendo un papel cada vez más estratégico. A pesar de este aumento de la difusión de la innovación en el entorno empresarial en sus más diversos formatos y contextos, sigue siendo un reto conseguir que genere resultados concretos y tangibles para la organización, lo que genera mucha frustración en los líderes debido a los escasos resultados obtenidos.

La falta de una dirección, un enfoque y un propósito bien definidos ha sido uno de los mayores obstáculos para el éxito de los viajes de innovación de las grandes empresas. En tales casos, falta una estrategia que oriente e integre las diferentes iniciativas de innovación de la organización . Vea en el diagrama a continuación los principales síntomas de esta falta de estrategia de innovación a la que se enfrentan las empresas y que Inventta ha identificado a lo largo de sus 16 años de experiencia con la innovación corporativa:

Pero, ¿cómo superar estos desafíos?

Inventta cree que una solución muy eficaz a este tipo de retos es la definición de una Estrategia de Innovación por parte de las empresas. Es el vínculo que conecta los esfuerzos de innovación con la estrategia empresarial de una organización, dirigiendo diferentes tipos de esfuerzos de innovación con el fin de maximizar la asertividad y el retorno sostenido para la organización en el corto, mediano y largo plazo, según la estrategia de la empresa y el contexto organizacional.

Cada estrategia de innovación es única y, aunque existen buenas prácticas, no existe una receta para la innovación. Por eso es muy importante una visión interna crítica de la organización, prestando atención a las particularidades del negocio, sus desafíos, su cultura organizacional y, sobre todo, su estrategia.

Con una sólida y consistente experiencia en el área, Inventta ha ayudado a muchas organizaciones grandes y medianas de los más diversos sectores a estructurar su propia Estrategia de Innovación. ¿Quieres comprender mejor cómo Inventta aborda y lleva a cabo este proceso, así como conocer nuestras referencias y casos en Estrategia de Innovación?

 

By: Fernando Contarim

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